Análisis del Steaua de Bucarest (Uefa Betis)

PRÓXIMO OBJETIVO

El Betis se medirá en los octavos de final de la Copa de la UEFA con un clásico de las competiciones europeas, el Steaua de Bucarest que, al menos a priori, parece más asequible que el AZ Alkmaar del que se acaban de deshacer los verdiblancos en la anterior ronda.

Sin embargo, los rumanos se han fijado como objetivo esta temporada reverdecer los laureles conquistados hace ahora 20 años, precisamente en Sevilla, donde ganaron la Copa de Europa, en aquella histórica final contra el Barcelona en el estadio Sánchez Pizjuán.

Presidido por un histórico del club como Marius Lacatus y entrenado por Cosmin Olaroiu, el Steaua ya no es el equipo que fuera la base de aquella mítica selección rumana de los años ochenta. Sin embargo, continúan en la élite de su país y, en la actualidad, marchan segundos de su Liga doméstica con 31 puntos, a uno sólo del líder, el Dínamo.

En esta Copa de la UEFA el Steaua está completando un notable periplo. Así, los rumanos lideraron su liguilla en la fase de grupos, en la que no encajaron ni un solo gol, pese a medirse a rivales de entidad como el Hertha de Berlín, la Sampdoria, el Lens o el más débil Halmstad, equipos estos dos últimos a los que golearon en Bucarest por 4-0 y 3-0, respectivamente. A ello hay que sumar que hasta el choque de vuelta de ayer de dieciseisavos ante el Heerenveen, en el que cayeron por 0-1 -pero hicieron valer el 1-3 de la ida-, no habían perdido en Europa este año.

Si se tiene en cuenta que en el global de los ocho partidos disputados hasta el presente en la UEFA han encajado únicamente tres tantos, no cabe duda de que el Betis, que tantos problemas está teniendo ante el gol este año, se encontrará con un adversario dotado de una defensa solvente y que tiene en el portero Carlos Fernández, fichado esta misma campaña procedente del Boavista, a un auténtico seguro de vida.

En el centro del campo también se ha reforzado el Steaua con los fichajes de Vasilica Cristocea y Razvan Ochirosii. Sin embargo los principales nombres en la medular son los de Nicoale Dicas, un jugador con visión goleadora y Gabriel Bostina, de cuyos centros al área deberá cuidarse el Betis ya que, sin ir más lejos, fueron sus pases de gol los que sentenciaron al Heerenveen.

Por último, en la delantera, el protagonismo es para el dorsal 19, Victoras Iacob, máximo goleador del Steaua con el que ha marcado 37 goles, seis de ellos esta temporada.

Así las cosas, el once tipo del Steaua que podría encontrarse el Betis no diferirá mucho del que jugara ayer ante el Heerenveen, con Carlos Alberto Fernández en portería; Goian, Radoi, Ogararu y Baciu en defensa; Bostina, Nesu, Paraschiv, Nicolita y Dica en la media; mientras que Iacob estaría en punta.

Con la vuelta en Heliópolis el 15 o el 16 de marzo, el partido de ida se jugará en el estadio Lia Manoliu de Bucarest, que dispone de un aforo de 60.120 plazas pero que, al estar dotado de una pista de atletismo, hará sin duda que los jugadores del Betis sientan menos presión ambiental por parte de la entusiasta hinchada rumana.

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